Después de pasar la noche en el camping iniciamos la ruta marcada. Al poco de salir nos encontramos con una pareja muy entrañable que también hacía el camino de Santiago, pero claro desde Bélgica,toma ya. Serán unos 2200 km mas o menos. Tras la parada continuamos y cruzamos varios riachuelos que cruzan el camino. Junto a ellos hay zonas de descanso y aprovechamos para tomar el almuerzo y con una "baguette" que corona el almuerzo. Continuamos avanzando y pasamos zonas de senderos, pistas junto a campos de millo y pequeños pueblos muy tranquilos. El recorrido sigue siendo algo sube/baja pero con poco desnivel.
Allá donde parábamos las panaderías y pastelerías nos ponían los ojos como platos. Baguettes, croassants... gracias que íbamos dando pedales que si no.. Respecto al trato los franceses se mostraban muy amables.
Acabando la tarde llegamos a nuestro destino el pueblo de Moorlas. En este caso nos quedamos en un albergue para peregrinos con literas en muy buenas condiciones. Allí coincidimos con un peregrino Argentino que anda haciendo el recorrido. Compartimos cena juntos y al ponernos al día supimos que era un antiguo trabajador de una tabacalera actualmente retirado. Tras la velada tocaba descansar para el dia siguiente continuar la ruta.
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